El policía de inmigración del aeropuerto J.F. Kennedy de New York que se ocupó de nuestro check-in se llamaba Flanagan y todo en él resultaba una especie homenaje a su nombre: Flanagan llevaba puestas unas gafas de aviador tintadas, mascaba chicle y se comunicaba principalmente mediante gestos ejecutados con barbilla. Me ofrecí el primero para …